La mujer de mi hermano es una película mexicana con escenas eróticas de 2005. En ella se cuenta la relación entre un hombre y su cuñada. Una historia con infidelidad, sexo prohibido y mucho drama. El título ya anticipa lo que va a ocurrir. Pero… ¿cómo se resolverá todo?
Créditos
- Título original: La mujer de mi hermano
- Año: 2005
- País: México
- Duración: 90 minutos
- Género: Drama, infidelidad
- Dirección: Ricardo de Montreuil
- Adaptación de la novela de Jaime Bayly (del mismo nombre)
- Reparto: Bárbara Mori, Christian Meier, Manolo Cardona, Gaby Espino, Bruno Bichir, Angélica Aragón, Beto Cuevas
Argumento de La mujer de mi hermano
Zoe (Bárbara Mori) es una mujer muy atractiva que lleva 10 años casada. Sin embargo, después de tanto tiempo, descubre que su relación está muerta. Para su sorpresa, se deja seducir por la persona que menos se imaginaba: el hermano de su marido. A partir de ese momento se desatará un peligroso juego de pasiones, secretos y venganzas. Una mujer y… dos hermanos. Un triángulo amoroso prohibido. Es una bomba de pasiones que explotará en secretos, deseos contenidos y amores rotos.
Una infidelidad prohibida: encuentros clandestinos
Hay que decir que la película La mujer de mi hermano contiene numerosas escenas eróticas, casi siempre entre la mujer y el hermano de su marido. Hay momentos muy morbosos donde él le mete mano en la cocina, por ejemplo, mientras el hermano y la madre están en el salón. La pasión se ve en cada escena donde la pareja de amantes secretos se reencuentran a escondidas. Los engaños dan más juego a esta aventura que prometía ser eterna. Pero es que entre infidelidades, pasiones y deseos, hay muchos secretos y mentiras. El argumento tampoco es que sea muy interesante, pero resulta lo suficiente entretenido como para sostener esta locura sexual. Por el título y la infidelidad que trata me recordó a Desearás a la mujer de tu hermana.
La mujer de mi hermano… Bárbara Mori
La bellísima actriz Bárbara Mori es la protagonista absoluta de esta película. Ella protagoniza todas las escenas subidas de tono. Y lo hace fantásticamente bien. Al principio se la ve tímida, con deseo, pero contenida. Por momentos se la ve pensativa, evitando lo inevitable… Parece una buena esposa. Después parece que es ella quien busca la pasión. Incluso engaña a su marido con sangre fría. Y cuando llega el momento de desnudarse, simplemente enamora a la cámara. Que cuerpo más bello, que forma de desear un beso, una caricia. Realmente está en el papel que interpreta. Su rostro está lleno de pequeños granitos e imperfecciones que la hacen aun más atractiva. Parece una mujer tan real. Por momentos es frágil, pero por momentos apasionada. Sólo hay que verla en acción para comprender que su mera presencia es un regalo divino para una película mediocre. Me encanta sobretodo cuando dice: «Esto no está bien», pero sucumbe el placer.
