En el sexo hay muchos tabúes y prejuicios culturales como producto de la ignorancia y el miedo a experimentar. Alguno de ellos son el cunnilingus, el sexo anal y la estimulación del Punto P por parte de los hombres. Te explicamos cuáles son para que te sientas en libertad de vivirlos de forma placentera.
Cunnilingus
Hay hombres que no les gusta estimular a sus parejas en sus genitales por temor, asco o simplemente flojera. Pero se están perdiendo una gran oportunidad de dar placer y de regalar a sus mujeres la posibilidad de experimentar multiorgasmos, sin necesidad de la penetración vaginal.
El hombre puede ayudarse con juguetes sexuales como vibradores o dildos que se encuentran en https://sensualitysex.com/.
Por supuesto, para hacerlo, tanto la mujer como el hombre deben mantener la higiene en sus genitales y en sus bocas para que la estimulación sea placentera. Lo importante es empezar de forma despacio y con una intensidad baja y aumentar de forma progresiva, haciendo caso a las reacciones de la mujer.
El cunnilingus o el sexo oral femenino puede ser un gran juego previo. Con la lengua, el hombre estimula el Punto G, sus alrededores y los labios vaginales con la lengua blanda y de forma segura, sin dar lengüetazos.
Con movimientos en zigzag o de arriba hacia abajo, el hombre experimenta y la mujer lo agradece con gemidos. Pregúntale a la pareja si lo está disfrutando y que otra cosa más le gustaría hacerle para complacerla.
Sexo anal
El ano es una de las zonas prohibidas más comunes entre las parejas por miedo al dolor o vergüenza. Las parejas deben saber que, aunque esta zona erógena no dilata de forma natural, hay maneras de evitar sentir dolor.
De hecho, es una zona de mucho placer por los innumerables nervios conectados. Una de esas maneras es untar con un lubricante y poco a poco ir dilatando con un dedo o con un plug anal pequeño. Por supuesto, lo que se vaya a introducir en el ano, tiene que estar limpio para prevenir infecciones.
La persona que va a recibir esta estimulación tiene que respirar y relajarse para evitar apretar el músculo. Después de introducir un dedo, puede introducir más para ir poco a poco dilatando. Después, el hombre penetra a la mujer con su pene, con suavidad y poco a poco.
El hombre también puede ser penetrado por su pareja con un juguete sexual o con sus dedos. También debe usarse lubricante. En caso de utilizar plugs anales, estos deben ser untados con lubricantes a base de agua, no de aceite para evitar dañarlos.
De hecho, el hombre tiene el Punto P, que se encuentra en la próstata, una zona erógena con muchas terminaciones nerviosas, que al ser estimuladas producen más placer que el experimentado al penetrar la vagina. Todo es probar y experimentar sin miedos, sino con ganas de sentir otras sensaciones.
Uso de juguetes sexuales
Algunas personas evitan el uso de los sextoys porque creen que estos reemplazan la intervención de los genitales de la pareja o que solo los utilizan las mujeres solteras, lo cual es totalmente falso. De hecho, las parejas los utilizan para romper la monotonía en la cama y los tabúes.
De los juguetes, hay una gran variedad como dildos de todos los tamaños, desde los más pequeños hasta los más grandes para estimular la vagina o el ano de la mujer. También los pueden utilizar los hombres para estimular su ano con lubricante.
Para las mujeres, hay vibradores con distintos niveles de intensidad para estimular el clítoris, el Punto G y los labios vaginales en solitario o con la pareja. También están disponibles plugs anales y bolas chinas para ser introducidos tanto en el ano como en la vagina respectivamente, para experimentar otras sensaciones.
Por supuesto, el uso de estos juguetes requiere que sean lavados antes y después de usarlos, secarlos bien y guardarlos en sus estuches para mantenerlos lejos de la luz y del polvo.
Al momento de adquirirlos, pregunta cuáles son los tamaños disponibles, exactamente para qué zona van dirigidos y si necesitan de baterías o de carga de electricidad.
Información y comunicación para romper los tabúes
Por supuesto, si vas a usarlos con tu pareja, primero pregunta qué opina y si los ha usado antes. La comunicación sincera es importante tanto en el sexo como en la relación con tu pareja. Esta también te permite romper los tabúes que puedas tener tú y la otra persona.
La información oportuna es otra manera de disfrutar de la sexualidad de una forma saludable y de dar rienda suelta a la fantasía en la cama. El sexo tiene mucho que ver con la honestidad, la comunicación, la higiene y las ganas de romper con los prejuicios de la sociedad.
