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Un encuentro esporádico

Un encuentro esporádico

Para que vean que no paro de tener cosas “distintas“. Un día como otro cualquiera me levante decidido a conseguir hacer planes y pasar una buena tarde. En uno de entre tantos sitios de contacto en los que estoy metido.

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Me fijé en el perfil de una rubia de ojos verdes, con muy buenas tetas. Todo empezó con un «hola» que tal lo típico para empezar una conversación después al rato empezamos a preguntarnos si podríamos quedar y conocernos para tener una tarde de buen sexo. Entonces descubrí que era una pareja liberal y que estaban interesados en hacer un trío, cosa que a mí me encantaría.

Estuvimos unos días conociéndonos vía mensajería instantánea ya se pueden imaginar de cual hablo. Nos pasamos fotos y mensajes provocativos. Incluso creamos un grupo para que no hubiese malos rollos, ya que es casi obligatorio cuando te vas a follar a la chica de una pareja.

Para romper el hielo quedamos a tomar un café los tres y tener un contacto directo diciéndonos lo que queríamos hacer y como sería todo pues solamente disponíamos de dos horas para aprovechar al máximo.

Un encuentro esporádico

La chica estaba nerviosa pues era ella la que iba a recibir dos pollas y a la que romperíamos todo el coño. Íbamos de paseo a la casa pues estaba cerca del lugar donde quedamos. Y así preparamos el encuentro.

El día que quedamos para hacer el trío subimos a la casa y ella tuvo que ir al baño mientras su chico y yo nos sentamos en el salón hablando tranquilamente diciéndome lo “putita“ que era su chica. A los pocos segundos apareció ella por la puerta con un sexy camisón de tiras negro liso en las que dejaba ver unas piernas de infarto. Se sentó a mi lado y su chico como yo nos acercamos a ella y nos la empezamos a comer. Él le bajó un tirante mientras yo la iba subiendo la mano por la pierna hasta llegar a su hermoso coño, tocándoselo por encima del tanga gris y blanco al mismo tiempo que la estaba tocando y comiendo el otro pecho (que por cierto tenía un pezón bien duro).

El novio le dijo a ella que se tumbase para que le pudiera comer yo el coño mientras a él le comía la polla. Ella respondió poniéndose de pie y quitándose el tanga. Nos mandó a los dos que nos desnudásemos. Dicho y hecho, según nos lo mandó ya estábamos los dos completamente desnudos y según terminamos de quitarnos todo ella empezó a comernos la polla a los dos a la ver (y muy morbosa que la hizo la guarra).

Él estaba muy ocupado disfrutando de la mamada que me estaba dando mientras me decía que la siguiera comiendo así, que la estaba poniendo muy guarra que se la estaba mamando de forma espectacular. Yo mientras le comía el chocho ese tan gordo que tenía. Ella estaba disfrutando como una perra pues no paraba de empujarme la cabeza más fuerte hacia su coño sin apenas dejarme sitio para poder respirar. De lo gordo y carnoso que lo tenía llenaba mi boca y mi nariz.

Un encuentro esporádico

Ella sugirió que nos fuésemos a la cama para estar todos más cómodos. Allí ella ya llegó a su máximo esplendor. Se puso de lado y mientras su chico se la follaba a mí me estaba dando una mama olímpica hasta la garganta (algún momento había en la que ella se echaba para atrás porque no podía con mi polla en la boca). Después ella se puso en la postura del perrito (ya saben a cuatro patas) y mientras que yo me la follaba ella se comía la polla de su chico.

 

La rubia estaba cachondísima, como una perra y al mismo tiempo que la montaba le estaba tocando el clítoris y metiéndole el dedo en el culo (sin lubricante alguno). Cuanto más violento y fuerte, más fuerte gemía cachonda se ponía y más a cachondos nos ponía a los dos.

El novio decidió cambiar de posición. Entonces ella se puso de pie mientras su chico la sugirió darle por el culo (era la primera vez de ella) pero no se mostró reacia en ningún momento con lo cachonda que la tenía. Y él se la clavó en todo el culo. Mientras la daba por detrás a mí me estaba poniendo súper cachondo de la mamada y la situación tan buena que estaba viviendo a pesar de que no era mi primer trío. Tenía la polla gorda, ya se pueden imaginar como le puso el culo pero no supuso lo que la vendría después… porque le entraría mi polla más larga dentro de ella.

Ella se sentó encima dándome la espalda mientras le realizaba a su chico una mamada y sentándose bruscamente metiéndose toda mi polla en su hermoso culo. Desde luego ella follada muy bien. Le di por el culo de forma espectacular. Contra más duro la daba más cachonda y guarra estaba. Yo más fuerte no podía dar. Entonces nos sorprendió a los dos diciéndonos que quería la polla de su novio también en el coño y que la diésemos bien fuerte hasta reventarla toda. Vamos, lo que viene siendo una doble penetración.

Un encuentro esporádico

Eso fue una gozada. Ella entre los dos estaba recibiendo fuertes embestidas de los dos, tanto anal como vaginal y ella gimiendo como una puta loba. No parábamos de gemir tanto ella como nosotros dos que la estábamos reventando toda. Cuando ya nada más podía hacer nos paró a los dos y se levantó un poco cogiéndome la polla y metiéndosela en el coño, ya una vez con ella dentro le dijo a su chico que se la metiese también en el coño y que la diésemos bien fuerte que quería sentirá sentirse la más guarra y la más puta que todas. Ahora íbamos a penetrarla los dos por el mismo coño.

Estamos los dos dándola bien fuerte y pasándolo los tres genial. Cuando estábamos a punto de corrernos nos dijo que quería que nos corriésemos en su cara. Sacamos nuestras pollas, a punto de estallar de excitación, y empezamos a masturbarnos sobre ella. En su chocho le entraba un vaso de tubo perfectamente, de como se lo habíamos dejado. Como iba diciendo ella se incorporó y se puso de rodillas en el suelo mientras nos comía la polla a los dos a la vez dejándonos casi sin respiración. Estamos súper excitados los dos y ella gozando. Él se la sacó primero y se estuvo pajeando mientras yo disfrutaba de la mamada que me estaba haciendo. Me la saqué un poco y me corrí en su cara (aunque gran parte de mi leche le calló en la boca) y su chico pajeándose se corrió como yo en su cara y boca. No desperciamos ni una gota de semen. La chica nos había exprimido bien. Y para terminar nos hizo otra mamada para sacarnos toda la que nos podía quedar.

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Comentarios (2)

Que maravilla .Quiero repetir aunque no sea con la misma pareja .Me gusta la variedad 😉 🙂

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A eso si se puede llamar un todo en uno como dios manda!! Vaya pedazo de experiencia. La verdad es que aunque he tenido una oportunidad de llegar a realizar un trío con una amiga, me raje a última hora. Creo que para mi es más excitante seguir teniéndolo como una fantasía, que llegar a cumplirlo, a pesar de que me ponga súper perraco cuando leo lo bien que lo pasáis en vuestros encuentros y experiencias.

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