El spanking, o la practica de los azotes y nalgadas, es mas común de lo que pensamos. Muchas veces es practicada sin saber qué es un juego erótico muy sano y divertido. Lo mas importante de todo es que sea consensuado y se determinen los roles. A continuación, más información de esta famosa practica intima y como disfrutarla. Es que es una palabra sexual que hay que conocer, como muchas otras que tenemos en nuestra guía sexual.
¿Qué es el spanking?
Uno de los juegos previos a las practicas sexuales, inclusive, durante ellas, es el spanking. Consta en definir los roles de la pareja primeramente. Es decir, quién será el dominante y quién el dominado. Ya que esta practica se basa en dar nalgadas o azotes a la persona que juega como sumisa o sumiso. La intensidad depende de los gustos, pero usualmente va desde las mas sutiles, hasta las más rudas.
La idea de este juego erótico, es el placer que va causando en los participantes. Pues al estar ligado con el morbo y la excitación del momento no se siente como una acción agresiva. A los amantes del BDSM les encanta.
Existen ciertos objetos muy comunes en esta practica sexual. Esto, para evitar un contacto directo con el cuerpo. Los cinturones de cuero flexible y bastones disciplinarios son los preferidos por muchos.
Consejos para disfrutar de esta práctica sexual
Disfrutar del castigo físico mediante azotes o nalgadas es algo que se logra en pareja. Termina siendo algo muy divertido y excitante. Hacerlo parte de tus practicas sexuales poco a poco y con naturalidad es la clave. Dar nalgadas con tus manos o azotar las nalgas de tu pareja con algún objeto puede implicar un juego previo. Aquí juega un papel muy importante la creatividad. La cuestión es que ambos lo disfruten y lleguen al placer. Así que además, ten en cuenta lo siguiente:
- Debes relajarte, es un juego, no un castigo
- Confía en tu pareja y en los acuerdos previos
- Conoce tu cuerpo y tu nivel de aguante, es primordial
- La comunicación previa y tal vez alguna palabra de emergencia te sirvan en algún momento.
- Utilízalo para cumplir fantasías
- No solo puedes usar tus manos, incluye fustas, correas o reglas. Los diferentes materiales y su peso, ofrecen diferentes sensaciones en el cuerpo.
- Alterna el spanking con alguna otra estimulación, puede ser anal.
- Recuerda que es una practica de pareja, respetar los limites del otro es necesario.
- Para finalizar, podemos decirte que el spanking puede ser un habito sexual muy saludable. Así que atrévete a probarlo y sobretodo disfrutarlo.
