En el mes de Abril ella se puso mala y estuve unos días sin ir a su casa. Cuando fui jugamos pero su hermano pequeño de 9 meses que no paraba de llorar. Nada había cambiado entre nosotras, a pesar del tiempo que habíamos estado separadas. Pero algo pasó para que todo cambiara…
Su madre la llamó para decirle que se lo llevaban al hospital, recogimos todo y nos bajamos al comedor y al rato vinieron sus primos.
Padre: Vámonos al hospital.
Amiga: ¿Pasa algo?
Padre: ¡Vámonos!
Me fui a mi casa y ellos se fueron al hospital. Al día siguiente sus padres estaban en el tanatorio porque su hermano había muerto. Me quedé paralizada sin saber que decir, fui al entierro me senté al lado de ella y no paraba de llorar y yo no sabía lo que hacer.
Su hermana se desmayó y todo parecía una pesadilla, nos fuimos a la feria después para animarla pero nada le animó. Miramos unas muñecas pero ella pasó de largo.
Yo: ¿Y Cameron dónde está?
Amiga: Se ha ido.
Yo me quedé callada diciéndome a mi misma “en buen momento le pregunto algo así». Su familia hizo luto; apagaron la tele, no podían escuchar música y tampoco podían comer carne y ella pasó de jugar a las Brazts.
Íbamos de un sitio a otro. Ella andaba con la mirada perdida sin saber a donde iba y la mayoría del tiempo estaba en el cementerio.
Desde ese día mi amiga no volvió a ser la misma, le habían arrancado una parte de ella. Seguíamos haciendo lo mismo pero no era igual, el día de mi cumpleaños yo esperaba que volviéramos a jugar con Cameron, pero ella me dijo esto:
Amiga: Este juego ya ha llegado muy lejos, solo piensas en ellos y en acostarte con ellos pero no piensas como estoy yo.
Yo: ¿Cómo voy a saberlo si no me lo dices?
Amiga: Es que no te das cuenta de nada, yo sé cuando quieres algo y cuando no y yo soy una tía no soy un tío tan solo es un juego.
Yo: Tú quisiste jugar, tú empezaste ¿crees que ahora me puedes quitar todo de golpe? Me harías mucho daño.
Amiga: A mí también me jode, pero parece que ellos te importan más que yo, es muy triste. Y tienes que tener en cuenta que ellos no existen realmente, sólo es producto de nuestra imaginación. Te voy hacer una pregunta: Si te diera a elegir ¿a quién elegirías?
Yo: A ti.
Amiga: Has pensando ¿ves? Eso es por que estás en duda. Te lo tomas todo muy a pecho, te lo crees todo. Mira es mejor que dejemos de jugar y que ellos se vayan durante un tiempo porque todo el mundo se da cuenta que mas que mi amiga pareces mi novia y yo no quiero que la gente piense que soy lesbiana, y ahora no te pongas a llorar.
Yo: Duele mucho.
Amiga: A mí también me duelen muchas cosas y me las callo por dentro, pero no lloro por que las lágrimas me hacen mas débil, ya no eres una niña, tú tienes todo lo que quieres yo no, mi padre es un diablo que sólo nos hace daño y amenaza a mi madre le pega cundo quiere y tu tienes a tus padres que te comprenden.
La verdad es que tenía razón pero yo no entendía nada, no era justo pensaba yo, mientras me hablaba solamente la escuchaba, no prestaba atención a lo que me estaba diciendo, sólo pensaba en lo que yo quería.
Amiga: ¿Me has entendido?
Yo: Aí.
Amiga: Vale, pues ahora vamos a dar una vuelta. Estoy cansada de estar siempre encerrada.
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