Sé que he estado ausente en el blog desde hace tiempo, pero he estado super liada con el trabajo y apenas he sacado tiempo para mí. Bueno, pero he sacado algo de tiempo para ligar por Internet, y bueno, entre mi casa y el trabajo tuve un encuentro esporádico… de sexo.
Últimamente, como no tengo tiempo de buscar chicos majos, he entrado a la web de contactos de Milanuncios a encontrar gente para un encuentro rápido. Si no la conocéis es pasion.com y como veis podéis encontrar gente de todo tipo buscando todo tipo de experiencias sexuales. De hecho fue de esa página donde encontré mi último ligue que os cuento en Mamadas en la cuarentena. Muy morboso por cierto.
Pues resulta que contacté con un chico que buscaba mas o menos lo que yo: una relación esporádica para sexo rápido. La verdad es que hay muchos chicos que buscan este tipo de relación, pero esta persona me llamó la atención porque desde el momento en el que contacté con él me pareció super agradable, paciente porque se esperó a que yo le dijera que podía quedar y al mismo tiempo morboso. Tenía unos 45 años, era relleñito, con barba… no me llamó la atención pero tampoco me desagradó. Pero lo mejor de todo era que vivía entre mi casa y el trabajo. Así que después de 4 o 5 quedadas fallidas finalmente pudimos quedar. Era difícil porque la mayoría de ocasiones hacía el camino al trabajo con poco tiempo y con mi hijo, pero un día conseguí 1 hora libre y dejé al nene con mi marido.
Recuerdo que quedamos en una fuente. Llegué con 15 minutos de retraso (típico de las chicas jeje). Se puso un poco nervioso al verme. Creo que esperaba que otra vez fallara, pero aparecí y tembló. Me dio dos besos. Me dijo que su casa estaba por allí cerca. Yo le hablé super simpática en todo momento. Llegamos a su casa. Era una casa con persiana. Al entrar vi que todo estaba un poco sucio, con muchas cosas desordenadas y, la verdad, lejos de desagradarme me dio morbo. Fui al aseo a prepararme para el encuentro. Y me preparé para hacerlo todo, a pesar de cómo tenía la casa.
Cuando llegué al salón me estaba esperando sentado en el sofá. Me dijo nervioso que nunca había hecho esto. Que había tenido alguna relación con chicas, pero que quedar directamente por una página de contactos no. Yo le dije que empezaríamos metiéndonos mano. Le acaricié el pene por encima de la ropa y le cogí una mano para que me manosera el pecho. Él estaba super cortado, tenía que guiarlo yo. Y me gustó. Era como un niño grande al que tenía que enseñar sexualmente. Poco a poco se fue soltando y me fue pidiendo lo que le daba morbo. Y me llevé una sorpresa porque me pidió que le chupara yo a él el pecho. Lo hice, pero lo cierto es que eso sí me desagradó. Estaba relletino y era como hacerlo con otra chica, y la verdad es que a mi me gustan los chicos. Pero lo hice para dejarlo contento y por experimentar sensaciones nuevas.
Después de comerme sus tetas (suena mal y todo jaja), le fui quitando la ropa y le desnudé completamente. Entonces empece a comerle la polla. Hacía tiempo que se la comía así a un extraño y la cogí con muchas ganas. Tenía bastante bello, muy negro, pero ya sabéis que eso a mí me encanta. Hasta le comí los huevos con ansia, tanto que me pidió el chico que le chupara sólo la polla. Se ve que los apreté demasiado y le hice daño. También me entraron ganas de lamerle el culo, pero eso no lo hice. No sé, digamos que ahí no había mucha higiene y me lo pensé dos veces antes de dejarme llevar por mis impulsos. Él también me comió el coño y no lo hizo mal. Le pedí que me absorbiera con fuerza, tenía ganas de sentir su lengua juguetona, pero se limitó a lamerme la vagina. Cosa que también me gusta, pero no jugó con mi clítoris y no se puso nada brusco, cosa que me apetecía en ese momento.
Después se sacó un condón viejo. La verdad es que me entró mal rollo por si no estaba bien, porque aunque no estaba caducado parecía que lo había sacado del cubo de la basura. Se lo puso, pero en lugar de penetrarme por el coño le pedí que me diera por detrás. Si se rompía o algo corría el riesgo de quedar embarazada, ya que no tomo nada, y por detrás al menos ese riesgo se elimina. Además hacía tiempo que no recibía un miembro por detrás, desde el encuentro con el negro que me provocó una fisura. Y la polla de ese chico no era muy grande, unos 13 o 14 cm, así que decidí arriesgarme. Me tumbé en el sofá, levantando el trasero con las rodillas y me dejé embestir. No lo hacía con la fuerza que me hubiera gustado, por lo que me tuve que ayudar con unos dedos para llegar a un orgasmo. Sólo tuve uno y estuvo bien. Pero en general la experiencia me dejó un sabor agridulce.
Durante los siguientes días me planteé si volver a quedar con este chico. Por un lado me decía que no, que no tenía la casa en condiciones, no me gustaba mucho y no me daba mucho placer. Pero por otro pensaba que sí porque todo eso en el fondo me daba morbo, tenía ganas de desmelenarme más de lo que lo hice en el primer encuentro y además el chico me propuso hacer un trío con un amigo suyo. Tardé 1 mes en decidir que sí, en volver a quedar, pero entonces ya no me respondió. Habíamos contacto por email y no sé si es que no quiere volver a quedar conmigo o simplemente después de tanto tiempo ya pensó que yo no quería quedar, y ni mira el email.
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